El filósofo expresa el conflicto de la libertad y la condición dramática de la filosofía en un mundo dominado por la servidumbre. Su idea de que la falta de libertad de los hombres no se debe a la naturaleza o al destino, convive con la convicción de que todos los seres humanos pueden realizar su deseo a través de la experiencia ética, la pasión de pensar y la práctica política.