"Rutinaria y convencional en la superficie, la vida fue para Franz Kafka una sucesión de padecimientos, d elos que da cuenta no sólo en sus ficciones sino también en sus diarios y correspondencia. Amó a varias mujeres pero no se sentía apto para convivir con ellas. Necesitaba la soledad y también le temía. Ansiaba dedicarse por completo a la literatura, pero se negaba a dejar su oscuro trabajo de oficina. Tenía una difícilrelación con su padre, pero vivió en el hogar paterno casi hasta el fin de sus días. Cuando enfermó gravemente, se aferró a la vida "como un niño que se agarra a las faldas de su madre".
Acaso nadie haya conocido tanbien a Kafka como Max Brod. Se encontraron por primera vez en 1902 y ya no se separaron. Kafka halló en su amistad una fuente de apoyo y consuelo, y lo hizo depositario de buena parte de su obra con la promesa de que la destruiría. Por suerte para la humanidad, Brod no cumplió con su palabra. Testimonio de primera mano, fruto de la admiración y el respeto de un escritor capaz de reconocer el gen en otro, esta valiosa biografía es, además, el conmovedor homenaje de un amigo." Contratapa.